OBAMA BUSCA DEJAR SELLO DE MUERTE DEFENDIENDO A PLANNED PARENTHOOD

Diego López Colín

Última actualización: 11 Noviembre 2016

 

 

La administración de Barack Obama ha propuesto una nueva norma que impide a los estados de la Unión dejar de financiar a Planned Parenthood, acusada desde mediados de 2015 de traficar con órganos y tejidos de bebés abortados en sus instalaciones, o cualquier otra institución de planificación familiar, por motivos políticos.

 

La razón de tal norma es para proteger a las instituciones que durante su campaña el republicano Donald Trump, ahora electo presidente, se comprometió a combatir.

 

Específicamente, la nueva regla requeriría que el dinero que el gobierno provee a Title X Family Planning, programa que da fondos a instituciones como Planned Parenthood, no pueda ser cortado por los estados.

 

Planned Parenthhood recibe fondos que provienen de dos programas: Medicaid y Title X, ambos dirigidos a los estadounidenses de bajos ingresos; sin embargo, ninguna de estas dos instituciones permite que sus fondos sean destinados al aborto.

 

Para Alejandra Diener, experta en temas de vida y familia, sería el legado de muerte que Barack Obama quiere dejar al gobierno de Donald Trump. Acusó a estas instituciones de asesinar bebés escudándose en los servicios de mastografías, papanicolau, entre otros, para justificar el dinero que gastan.

 

La experta llamó la atención sobre el hecho de que estas instituciones de “control de vida” sospechosamente están instaladas en lugares donde hay gran marginación social.

 

Por su parte, Cecile Richards, presidenta de Planned Parenthood Federation of America, dijo que esto hará una verdadera diferencia en la vida de tantas personas, pues, gracias a la administración de Obama, las mujeres todavía podrán tener acceso a los anticoncentivos que necesitan para planificar sus familias.

 

Cecile Richards admitió que se sienten devastados y enojados por la victoria de Donald Trump sobre Hillary Clinton. “Devastados, enojados, con el corazón roto, indignados, conmocionados, tristes, asqueados, avergonzados, desanimados, agotado, destrozados”. Con estas palabras, Richards describió la situación anímica de Planned Parenthood.

 

Planned Parenthood había invertido más de 30 millones de dólares en la campaña de Hillary Clinton a la presidencia.

 

 

 

 

 

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