LOS BENEFICIOS EN LA SALUD FISICA Y MENTAL DE LOS ABUELOS

AL RELACIONARSE CON LOS NIETOS

 

 

 

De acuerdo con el título de este documento es que abordaremos el tema, sin embargo, cabe decir que no sólo la relación con los nietos: niños, adolescentes o adultos se verán los logros en la salud física y mental de los abuelos sino también la buena disposición que tengan de estar relacionados con su entorno social, llámense amigos, vecinos o comunidad parroquial a la que pertenezcan será también importante.

 

Se ha comprobado, a través de encuestas en un estudio del Instituto sobre el Envejecimiento de la Universidad de Boston,  que la relación entre los abuelos y nietos también es un bálsamo para éstos.  Las familias están envueltas en una vorágine de compromisos laborales donde no sólo trabaja el padre, también  la madre trabaja fuera del hogar de modo que los nietos también se benefician psicológicamente de la relación con sus abuelos, influyéndoles en su bienestar psicológico hasta bien entrada la edad adulta.

 

El estudio también ha constatado que cuando los nietos ayudan a los abuelos a ir a comprar, en las tareas domésticas o realizan funciones de asesoramiento, los mayores se sienten peor e, incluso, incrementan los síntomas depresivos ya que los abuelos esperan poder ayuda a los nietos aún cuando son mayores y no al revés.  Esta actitud podría estarnos indicando que no reconocemos que al llegar a una determinada edad y aún cuando físicamente pudiéramos hacer nuestras actividades cotidianas, no somos capaces de recibir con amor aquellas señales que nos dispensan los hijos y los nietos.  Dejémonos querer y consentir.

 

Cuando los hijos han formado su hogar y llegan los bebés, los abuelos juegan un papel importante ya que brindan un desahogo a los padres primerizos, sin olvidar que los padres  están jugando sus roles e indican en qué y cómo se les puede auxiliar.  Para los abuelos es muy gratificante y lleno de cariño el poder compartir con los padres ese acontecimiento tan feliz, renuevan a nivel personal gratos recuerdos, se sienten actualizados y reviven vivencias.  Ayudar de vez en cuando y pasar un buen rato con los nietos los vigoriza, sin olvidar que la tarea de educar les corresponde a los padres.

 

Si podemos encasillar el comportamiento de los abuelos en la vida de los nietos podríamos anotar los siguientes:

-comportamiento rígido y tradicional (autoritario)

-búsqueda de diversión (relajados y no autoritarios)

-remplazo de los padres (cuidado de los nietos todos los días o el máximo de días)

-buenos conversadores (sobre temas familiares o de interés para los nietos)

-distantes (rara vez ven a los nietos)

 

Lo anterior no quiere decir que sea definitoria dicha clasificación, es más,  habrá otros comportamientos e inclusive habrá abuelos que no sólo tengan uno sino varios comportamientos según las circunstancias lo ameriten.

 

Lo que sí es importante es que la contribución que hacen los abuelos a la familia de manera positiva es de gran ayuda ya que pueden ser lazo de unión entre padres e hijos en momentos de crisis, apoyar en el cuidado de los hijos cuando los padres no pueden hacerlo, son transmisores de valores familiares  y vínculo entre las generaciones.

 

Los valores son bienes que la inteligencia del hombre conoce, acepta y vive como algo bueno para él como persona, es aquello que se valora como deseable y necesario para la convivencia diaria.

 

Pero, los abuelos principalmente son  transmisores de  las virtudes, son hábitos buenos que nos llevan a hacer el bien, son un medio eficaz para colaborar con Dios. Traen como consecuencia que hemos decidido hacer el bien colaborando con el plan de Dios.

 

Los ambientes escolares hacen énfasis en los valores pero pocas o ninguna ocasión mencionan las virtudes.

 

La convivencia con los nietos también permite a los abuelos estar en contacto con la nueva generación y de esa forma existe una transmisión de saberes entre ambos por ejemplo el uso de tecnología, la lectura, la música, etc.

 

Es necesaria una relación saludable con los nietos, importantísimo es  establecer límites entre padres y abuelos. Los abuelos se siente amados, productivos y útiles.  El vínculo entre abuelos y nietos tiene un gran potencial, ambos se nutren emocionalmente en una relación donde hay cariño sincero que perdura a lo largo de sus vidas.

 

 

 

 

 

 

SILVIA MADRIGAL HERNÁNDEZ

Marzo 2014

 

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